¿Qué pasó con Clesa?

Clesa, también conocida como la Compañía Lechera de Asturias S.A, fue una de las empresas más importantes de la industria láctea en España. Fundada en 1956, se especializó en la producción y distribución de productos lácteos, como leche, mantequilla, queso y yogur.

En los años 80 y 90, la compañía experimentó un gran crecimiento y se convirtió en una de las líderes del mercado de lácteos en España. Sin embargo, esta situación comenzó a cambiar en la década del 2000 cuando empezaron a surgir dificultades financieras y de producción en Clesa que finalmente la llevaron a la quiebra.

A pesar de varios intentos de rescate por parte de la junta ejecutiva, la compañía no logró recuperarse y en el año 2012, Clesa fue declarada en bancarrota. A partir de entonces, la marca pasó a manos del fondo de inversión Lactiber, que se encargó de la comercialización de los productos Clesa en algunos puntos de venta en toda España.

En la actualidad, Clesa sigue siendo recordada como una de las grandes compañías lácteas de España y su quiebra se considera un ejemplo de cómo una mala gestión financiera y de producción puede poner fin a una empresa en auge. Sin embargo, su legado ha perdurado y sus productos todavía son valorados por los consumidores que recuerdan su calidad y sabor.